lunes, 22 de junio de 2009

Excelente artigo de Vicent Navarro para entender a crise económica e o seu comezo en EEUU

Este artículo analiza las causas de las crisis económica y financiera en Estados Unidos, indicando que la polarización de las rentas ha sido determinante en la aparición de tales crisis.
.
.
Las causas profundas de la crisis económica actual son: en primer lugar, la enorme polarización de las rentas que se ha ido produciendo en Estados Unidos a partir de los años 1960 y que alcanzó su máxima expresión en estos primeros años del siglo XXI. En segundo lugar, también en Estados Unidos: la desregulación de la banca mediante la anulación, a mediados de los años 1980, de la ley Glass-Steagall Act que se había establecido precisamente después de la gran crisis de 1929 y durante la Gran Depresión para disminuir el excesivo poder de la Banca y proteger los ahorros de la población. Es menester analizar estas causas para prever consecuencias y soluciones.
.
En 2005, en Estados Unidos, el 1% de la población tenía el 28% de toda la renta del país, una concentración de la renta (24%) semejante a la que existía a mediados de los años 1920, antes de que explotara la Gran Depresión del siglo XX. A partir de entonces, las medidas tomadas por la Administración Roosevelt antes y durante la II Guerra Mundial, tuvieron un impacto redistributivo muy importante, de manera que, cuando la guerra terminó, tal concentración descendió. La renta de los ricos (el 1% de la población) bajó al 12%, descenso que continuó hasta finales de los años 1970.
.
Durante este periodo, la clase trabajadora era fuerte y había impuesto al mundo empresarial la necesidad de pactar no sólo el nivel salarial sino también las condiciones de trabajo y, a través de su influencia política, la expansión del estado del bienestar y la distribución de la renta nacional, aplicando políticas redistributivas que disminuyeron las desigualdades.Así, desde 1949 a 1979, el incremento de las rentas (facilitado por el aumento de la productividad) se distribuyó a todos los sectores de la población de manera que el incremento de la renta por cada decila de la población fue bastante semejante, con las decilas inferiores creciendo algo más (116%) que las decilas superiores (99%)*. Las políticas económicas eran intervencionistas con un carácter keynesiano claro. Incluso el presidente republicano Richard Nixon se definió como keynesiano.
.
La clase trabajadora había adquirido gran poder. Y como siempre ocurre, siguió incrementando el nivel de sus demandas. Cuando la clase trabajadora no tiene trabajo (al tener un desempleo alto) quiere tener trabajo. Cuando lo tiene, quiere tener buenos salarios y unas buenas condiciones de trabajo, y cuando alcanza esto último, quiere tener una voz en la decisión de cómo realizar el trabajo y cómo gestionar la empresa.
.
Durante el periodo 1945-1979, el nivel de demandas y conquistas laborales había ido aumentando a medida que la clase trabajadora iba consiguiendo sus peticiones, resultado de su mayor poder. En realidad en los años 1960 y principios de los años 1970, hubo gran número de movilizaciones obreras (que se extendieron a todo el mundo occidental: el Mayo 68 francés, el Otoño Caliente en Italia, etc.) que atemorizaron a la clase empresarial. Complicando las cosas para el mundo empresarial, estaba la guerra de Vietnam, que al incrementar enormemente el gasto público estadounidense sin incrementar los impuestos para financiarla (el Gobierno federal era consciente de la enorme impopularidad de aquella guerra, hecha, como siempre, por los hijos de la clase trabajadora) no se atrevió a subir los impuestos para financiarla contribuyendo a crear una gran inflación.
.
La clase empresarial estaba a la defensiva; era consciente de que estaba perdiendo poder y, como siempre ocurre, respondió. La primera respuesta tuvo lugar durante la Administración Carter (1977-1981), cuando el gobernador de Banco Central Estadounidense (The Federal Reserve Board), Paul Volcker, creó una recesión a fin de aumentar el desempleo y debilitar así a la clase trabajadora. Lo dijo claramente, al afirmar que había que disminuir los costes laborales para reducir la inflación.La manera de aumentar el desempleo fue aumentando los intereses bancarios de forma muy acentuada, lo cual determinó una disminución muy fuerte del crecimiento económico.
.
Jimmy Carter fue sucedido por Ronald Reagan (quien mantuvo a Paul Volcker como Gobernador de la Reserva Federal), y desarrolló con mayor intensidad las políticas económicas liberales que incluían una visión del Estado en la que éste debía favorecer explícitamente a las rentas superiores (y al mundo empresarial). Esta prioridad a las rentas del capital se justificaba con el argumento de que estas clases pudientes eran las que ahorraban más, con lo cual se facilitaba así la creación de capital e inversión. Era el famoso trickle down que afirmaba que la riqueza creada favoreciendo a los ricos terminaría favoreciendo a todos los demás. Se subrayó también que la reducción de impuestos al incrementar la capacidad adquisitiva de la población, aumentaba la demanda y estimulaba el crecimiento económico.
.
Este supuesto era conocido como la teoría supply side. Y puesto que los ricos son los que pagan más impuestos, los primeros beneficiarios de tales políticas fueron los ricos. Tales políticas fueron muy exitosas. Las rentas superiores aumentaron, en el periodo 1979-2005, de una manera muy acentuada. El 20% de renta superior incrementó el 53% su renta (para el 5% superior, el incremento fue de un 81%), mientras que las rentas medias y bajas disminuyeron o crecieron muy lentamente (el 20% de renta inferior vio disminuir sus rentas un 1%, y el siguiente 20% las vio subir sólo un 9%). En otras palabras, la clase trabajadora que representa el 48% de la población vio disminuir sus rentas o las vio crecer de manera muy lenta. La clase media incrementó sus rentas un 15%.
.
Las desigualdades sociales crecieron, por lo tanto, de una manera muy marcada durante el periodo liberal. Las rentas superiores –burguesía, pequeña burguesía y clase media de renta alta- vieron sus ingresos crecer de una manera muy notable a costa de las rentas medias e inferiores, que eran las de la clase media baja y de la clase trabajadora.
.
El hecho de que el crecimiento de las primeras se hiciera a costa de las segundas se debe a que la riqueza que se había creado como consecuencia del crecimiento de la productividad (y que se había distribuido más o menos en términos igualitarios en el periodo 1945-1979), se distribuyó en términos muy desiguales. A causa, primordialmente, del cambio de las relaciones de poder de clase durante aquel periodo. Durante la época neoliberal (1981-2008), el mundo empresarial rompió con el Pacto Social, y recuperó su enorme poder político (con los Presidentes Reagan, Bush padre, Clinton y Bush hijo) desarrollando políticas públicas que beneficiaron enormemente a las rentas superiores. Este fue el objetivo de tales políticas neoliberales. El neoliberalismo fue la ideología de clase de las rentas superiores **.
.
Este proceso de polarización social fue teniendo lugar a partir de finales de los años 1970, alcanzando su máxima expresión en estos últimos años. El porcentaje de la renta nacional que tenía la clase trabajadora y clase media de renta media y baja (60% de la población), pasó de ser el 35% en 2000 al 29% en 2005. De ahí que la población se viera forzada a pedir prestado a los bancos y a tener tarjetas de crédito, con lo cual la deuda de las clases populares fue creciendo en la manera en que el porcentaje de su renta fue disminuyendo.
.
En los años 1990, la deuda promedio de una persona representaba el 2% de la renta disponible (después del pago de impuestos). En 2005, había subido a un 25%. Pero donde el endeudamiento fue mayor fue en el sector inmobiliario, en que para comprar la vivienda, la deuda de una persona pasó de representar el 90% de su renta personal (después de pagar impuestos) en los años 1990, al 140% en 2006, y ello como consecuencia del crecimiento especulativo del precio de la vivienda.
.
El Gobierno federal facilitó este endeudamiento bajando los intereses, que pasaron de un 5,1% en los años 1990 a sólo un 1,4% a partir de 2002. Esta medida respondió al interés de la Administración Clinton (1993-2001) y también de la de Bush hijo (2001-2009), de estimular la economía que había caído en recesión después de la ruptura, en marzo de 2000, de la burbuja de Internet y los e.com. Se creó así una nueva burbuja, la burbuja inmobiliaria, que también explotó.Pero, ¿por qué ahora? Para responder a esta pregunta, tenemos que analizar qué pasó con el otro polo, es decir, qué pasó con las rentas de los ricos, o sea, las rentas del capital.
.
Poder económico es sinónimo de poder político. De ahí que no es bueno para la democracia de un país que haya una polarización de las rentas con grandes desigualdades. Los ricos pueden ejercer un gran poder e influencia sobre los políticos, y ello ocurre en aquellos sistemas electorales que están privatizados, es decir, que la financiación de las campañas electorales se hace primordialmente con fondos privados. Así, el coste de las últimas elecciones presidencial y al Congreso de EE.UU. alcanzó la enorme cifra de 5.300 millones de dólares, provenientes en su inmensa mayoría de grandes grupos económicos y financieros; y del 30% de las clases de nivel de renta superior del país. Incluso el candidato que consiguió movilizar mayor número de aportaciones pequeñas (menos de 200 dólares), el candidato demócrata Barack Obama, estas pequeñas aportaciones significaron sólo una cuarta parte de todo el dinero que obtuvo. La gran mayoría, tres cuartas partes, procedió de importantes donaciones de grandes empresas, de la banca, de las compañías de seguros, de los grupos y asociaciones profesionales, y de una larga lista de grupos de poder que le financiaron para así tener acceso e influencia al candidato cuando Barack Obama ganó.
.
La enorme carestía de estas campañas (para comprar tiempo televisivo que se ofrece al mejor postor sin ningún tipo de regulación o límite, así como otros elementos y equipos muy costosos), discrimina a los candidatos de izquierda quienes tienen dificultades para obtener apoyos económicos del mundo empresarial corporativo (lo que se llama The Corporate Class en EE.UU.). A fin de conseguir tales fondos, los congresistas - senadores o representantes de la Cámara baja -, tienen que recoger cerca de 20.000 dólares cada semana durante el tiempo que están representando a la población y a los que les financian. Es una carga enorme que disminuye su representatividad y les distrae de sus funciones ***.
.
Este sistema, que da poder a los lobbies económicos y financieros, comenzó a funcionar precisamente en los años 1970 como parte de la respuesta del mundo empresarial frente a las conquistas del mundo trabajador durante el periodo 1945-1979. La influencia política de la clase empresarial (Corporate Class) adquirió gran protagonismo a partir de las administraciones Reagan, Bush padre, Clinton y Bush hijo. La Corporate Class financió ambos partidos haciendo sentir su influencia en el desarrollo de las políticas liberales.
.
Un elemento clave de esta Corporate Class fue el mundo financiero, y muy en particular la Banca (The Wall Street), muy influyente sobre el Banco Central Estadounidense (The Federal Reserve Board). El Presidente Ronald Reagan nombró, en 1987, a uno de los agentes de Wall Street más fundamentalistas entre los muchos neoliberales existentes en la comunidad bancaria, Allan Greenspan, Gobernador del Banco Central (Federal Reserve Board). Éste, junto con otro banquero, Robert Rubin, cuando éste era ministro de Hacienda (Secretary of the Treasure) del Presidente Bill Clinton (el Presidente demócrata más cercano a Wall Street que ha habido, según el que fue su ministro de Trabajo, Robert Reich) inició la desregulación de la banca, anulando la ley Glass-Steagall Act, que se había establecido precisamente durante la Gran Depresión para disminuir el gran poder de la Banca y proteger los ahorros que la población tenía en los bancos.
.
Aquella ley separó la función de guardar dinero (función reservada a los bancos comerciales o de depósito), de la función de inversión, con los riesgos que ello conlleva (bancos de inversiones), y de la función de aseguramiento (compañías de seguros). Esta separación era fundamental para evitar que una misma entidad financiera hiciera todas estas funciones, en cuyo caso, el probable perdedor sería el ciudadano que coloca sus ahorros en la banca, y que son utilizados por los banqueros para especular con aquel dinero, con un aseguramiento nulo o muy bajo, que es precisamente lo que había ocurrido antes y durante la Gran Depresión.
.
La anulación de tal ley Glass-Steagall Act significó la desregulación de la banca. A partir de 1986, ésta pudo hacer prácticamente lo que quiso. En el momento de explosión inmobiliaria (julio de 2007), los bancos ofrecían hipotecas en términos sorprendentemente fáciles que luego se convirtieron en tóxicos al no poder pagarse, en parte debido al enorme problema del endeudamiento explicado en la primera parte de este artículo. Ahí está el origen de la actual crisis financiera.
.
* Léase Arthur McEwan, “The Current Economic Crisis : Inequality Power and Ideology”. Political Economy Research Institute, 5 de mayo de 2009 (www.peri.umass.edu/nc/326/calendar/359/).
.
** Vicenç Navarro (ed.), Neoliberalism, Globalization and Inequalities. Baywood, Amityville, New York, 2008.
.
*** Léase Robert G. Kaiser, So Damn much Money. They Triumph of Lobbying and the corrosion of American Government. Alfred Knoff, Nueva York, 2009.

O Grupo dos "Históricos" do Socialismo Vilalbés reclamamamos que se convoque asamblea ordinaria cuxos prazos de convocatoria xa excederon fai tempo

.
Fai xa un par de semanas Pedro Durán, afiliado da agrupación municipal vilalbesa do PSdeG-PSOE, membro do gruo dos "Históricos" e antigo concelleiro do PSdeG-PSOE en Muras, enviou unha carta ó noso Sº Xeral, o Sr Eduardo Vidal, para recordarlle que ten obrigación de convocar asamblea ordinaria como mínimo cada seis meses como establecen os estatutos do partido, e que nestes momentos o prazo está sendo incumprido dende xa fai tempo, tendo en conta que non convocou ningunha asamblea ordinaria dende a súa elección como Sº Xeral da nova executiva local en Outubro do ano pasado. O compañeiro Pedro Durán remitiu copia a Executiva Nacional do PSdeG-PSOE e a Executiva Federal do PSOE para dar a coñecer esta situación ós nosos dirixentes.
.
Neste estatutos segundo o capítulo II artigo 4 do Regulamento de Asambleas é un dereito dos militantes a súa convocatoria polo que debería de ser prioritaria a súa celebración, xa que esta é o cauce de participación que témolos militantes na vida orgánica do partido a nivel local e polo tanto máximo órgano para a participación dos militantes e o debate interno. Se a convocatoria deta asamblea non se producise lóxicamente teríanse que tomar as medidas legais para denunciar esta situación ante os organismos pertinentes.

Como podedes observar a situación da agrupación local é lamentable e se coharta absolutamente a democracia interna e o debate no seno da organización como vimos denunciando dende fai tempo. O mesmo tempo que esto sucede, desaparece a vida orgánica e o que é o peor de todo, a iniciativa política do PSOE en Vilalba exceptuando as iniciativas que os concelleiros pertencentes o noso grupo presentamos no concello desparece totalmente, e parece que o único uso que se lle da o partido é únicamente como lobby de poder para que algúns medren persoalmente.

Por outro lado podemos observar como ante o desenrolo da campaña das eleccións europeas o noso partido en Vilalba desapareceu e non deu sinales de vida como se as eleccións non fosen con eles, ou como senon tivesen nada que gañar con elas, conquerindo un resultado mediocre como non podería ser doutro xeito e camiñando hacia o máis absoluto fracaso nas próximas eleccións municipais se non se toman xa as medidas pertinentes para remedialo.

A todo isto, o máis grave é o comportamento da dirección local do partido cunha parte do grupo municipal e por suposto coa súa portavoz, xa que se está a traballar cunha deslealtade absoluta hacía nós, ocultando información e traballando as nosas espaldas sen comunicarnos aquelas cousas que poderían ser de utilidade para o noso traballo e o ben dos cidadáns de Vilalba.

sábado, 20 de junio de 2009

Cartas a Antón de Bernardo García Cendán (19-06-2009)


Aproveitando a carta de Bernardo García, quero amosarvos a todos/as a miña felicidade polo nacemento de Arturo Bermúdez Prieto, o meu novo primo que para min é case como o meu primeiro sobriño. Acaba de nacer saniño e fermoso como podemos ver na fotografía, moitas felicidades a Arturo e Ana por facelo tan ben e moita sorte nesta nova andadura como papás.
.
.
Meu benquerido Antón:
.
Efectivamente, como ti me dixeches, estamos de remate. Non tolos, afortunadamente, creo, pero si de final de tempada: esta é a última carta. Con este motivo, a primeira cousa que me vén á cabeza é a de recuperar algún dos moitos temas dos que me falaches ao longo do ano e que eu non cheguei a comentar; pero recoñezo que a túa idea é mellor, como adoita acontecer. Cando che dixen polo teléfono que ía escribir a última carta, a túa reacción foi mostrar o noso agradecemento a toda a xente que nos escoitou ao longo do ano: non sabemos nin cantos nin quen foron, pero alguén habería e merece a nosa gratitude. En calquera caso, sabemos o nome dalgunhas persoas que estiveron ben atentas: a túa muller, a miña nai e unha señora chamada Chus, da parroquia de Ladra. Algo é algo. Aí lles queda o noso recoñecemento.
.
Pero non imos deixar así esta misiva: algo máis teremos que dicir. E poderiamos comezar cun tema que sempre fomos adiando e que, sen embargo, nos preocupou. Refírome á lea lingüística montada en Vigo por ese grupo que se fai chamar “bilingües” e que outros prefiren recoñecer coma “bífidos”, tal que as malas serpes. Se che digo a verdade, a min dáme preguiza volver sobre ese asunto que xa cansa, pero quero dicir dúas cousas das que ti me falas con insistencia. A primeira é que, polo escoitado, resulta que a mestra organizadora desa historia non é precisamente bilingüe, é dicir, nin sabe nin quere aprender algo da nosa lingua; busca escusas para non ter que facelo, e xustifícase no nome dunha liberdade que non nos acepta aos que queremos igualdade de dereitos para a nosa lingua. Non é serio. Coma ela hai moitos, de xeito que, ao final, os verdadeiros bilingües somos, curiosamente, os que defendemos o galego e tamén sabemos falar e escribir en castelán. Xa digo, non é serio e non merece máis atención. A segunda cousa xa me preocupa especialmente: parece ser que nas escolas vilalbesas hai nenos da vila (insisto, da vila) que tratan de inxuriar aos galegofalantes co alcume de “galeguistas”. Ti coméntasme que estarías orgulloso de que te chamasen así, e sei dun bo grupo de escolares que tamén o están, pero resulta, seica, que algúns dos así alcumados entenden que lles están a chamar aldeáns e acaban tristemente por se avergoñar do seu xeito de falar e do de seus pais. O triste é que non son poucos. Como ti ben dis, Antón, vólvese abrir un conflito que parecía superado: a discriminación da xente do rural. Sei dunha estudante de maxisterio que, de nena, choraba diante da súa nai por seren da aldea. Non sei se foi consecuencia, pero acabou por liderar a loita contra o noso idioma. É só un caso, claro, pero, polo que percibín nas aulas, temo que haxa moitos máis.
.
Outra cousa. Con ocasión da “consulta” sobre a lingua que ían realizar os de Feijoo, ti, meu amigo, fixéchesme unha observación que non quero deixar no tinteiro. Lembrabas que, cando eras noviño, o teu mestre contaba a historia das moitas persoas importantes, entre eles algún ensinante e algún cura, que estaban polo labor de que fose derrubada a muralla de Lugo porque impedía a entrada do progreso na capital. Ao final resultou que a operación tiña excesivas dificultades técnicas e tiveron que se conformar con abrir nela as grandes portas que agora contemplamos. Se daquela, dicías, se tivera feita unha consulta, é posible que moita xente, no nome da modernidade, votara polo derrubamento do actual monumento protexido. A túa conclusión foi pertinente e eu quero subliñala: canta xente acomplexada polo que consideran moderno aceptarán a desaparición da nosa lingua, o máis grande monumento cultural que temos? Aí deixo a túa pregunta agardando a resposta dos supostos bilingües que en realidade non son tales.
.
Tamén me gustaría falarche hoxe de dúas festas que se instauran en Vilalba. Unha, a feira medieval e a outra, unha convocatoria para celebrarmos xuntos, na praza da igrexa, a noite de San Xoán con gaiteiros, sardiñas e viño ofertados polos bares da zona. Non teño tempo de facer os moitos comentarios que desexaría. Simplemente quero manifestar o esencial das palabras con que ti, Antón, me anunciaches estes acontecementos. Non está nada mal, dicías, que se recupere esa zona da nosa vila que, de ser central, leva camiño de se converter en marxinal: antes, cando se falaba da praza, todo o mundo entendía que era a da Igrexa. Agora, os máis novos entenden que é a do cementón, unha mágoa. Cadro de acordo contigo, e, pola mesma razón, tamén aprobo esa idea que lle andas a comentar a quen teña a paciencia de te escoitar: a ver cando fan desaparecer os coches de diante da igrexa e son substituídos por unha ampla terraza unida ao mellor lugar de Vilalba para poñer unha boa cafetería. A casa de Goldeiros sería ideal. Así mo dis, amigo Antón, e así o poño, porque me parece unha idea moi interesante.
.
Aínda me quedaba dicir algo de Agustin Fernandez Paz que vai ser homenaxeado pola Asociación de escritores en lingua galega, pero del xa temos falado noutras ocasións e coñece ben o aprecio que ambos lle temos.
.
E remato dándolle a benvida a un novo membro desta nosa Vilalba, o Arturiño. É un novo sobriño-neto con que me agasallaron Arturo e Ana. Como sei o moito que ti lles queres, aproveito para mandarlles desde esta última carta os nosos parabéns máis agarimosos.
.
Nada máis, meu Antón, e xa non é pouco. Se Deus o quer e a vida nos deixa, trataremos de proseguir esta comunicación despois do verán. E se non, ata sempre na memoria agradecida. Segues tan túzaro coma sempre, pero es boa xente e por iso te aprecia.
.
Bernardo

martes, 9 de junio de 2009

Cartas a Antón de Bernardo García Cendán (05-06-09)

Meu amigo Antón:
.
Xa me gustaría facer o que me pides a cotío. Efectivamente, tamén a min me da moita pena despedir aos vilalbeses que se van de entre nós definitivamente. Algo deles, sen embargo, queda sempre nas nosas vidas, porque estaban aí cando aprendiamos a primeira das leccións sociais, relacionarnos coa xente. A xente eran eles e elas, os que agora van marchando. Xa sei, meu amigo, que ti tamén o percibes así, e por iso non me estraña que me insistas en que nestas cartas deixe constancia do noso pesar por cada adeus pronunciado no silencio dun nó na gorxa e dunha pregaria nos beizos. Ben quixera eu compracerte, Antón, porque estou convencido de que, se un día no futuro, alguén atopase estas comunicacións e lle dera por lelas, había ser bonito que aparecesen diante dos seus ollos os nomes inesquecibles. Ben quixera, xa que logo, pero comprenderán os lectores que non nos é posible facelo en tódolos casos. Algunhas veces, sen embargo, nin ti nin eu nos podemos resistir. Nesta semana foise Ana e foise Carmita, ambas moi próximas a nós, ambas cedo en demasía: aínda lles quedaba moito amor e moito agradecemento para encher de ledicia os anos do seu devalo por esa costa abaixo da vida que debería ter sido moito máis longa.
.
Coñecín a Ana en Vilalba, claro. Era a filla do Benigno, o panadeiro, pero, curiosamente, non foi aquí senón no distante París onde aquel coñecemento se trocou en forte amizade: as visitas que nos faciamos no entorno de Versalles, con palabras, risas e larpeiradas vilalbesas, alegráronme moitas tardes de morriñentos domingos de emigrante, e iso non se esquece. Cando, xa retornados, nos atopabamos polas rúas do pobo, aquela amizade reverdecía firme, malia terme ela confesado unha atávica envexa adolescente polo moito que me quería unha malograda irmá súa, chamada Hortensia, a quen eu veneraba nos meus poucos anos. Seguro que alí onde agora estean non ha faltar o meu nome na súa conversa. E dáme azos.
.
Carmita era miña veciña da praza da igrexa, un micromundo no mundo vilalbés daquela época. Filla da Ánxela, irmá do Epi, levaba no rostro unha ledicia permanente que, sen dúbida, tiña herdada da súa nai e compartida polo recoñecido humor do seu irmán, o dos discursos imprescindibles en toda reunión de vilalbeses que se prezaren de tales. Cada vez que vía a Carmita renacía entre nós unha vella complicidade por buscar algo escrito daqueles discursos “epicéntricos” ou tratar de recordar saborosas anécdotas da súa simpática nai, cousas que eu desexaba publicar. Non foi posible: en poucos anos foi perdendo a Epi e ao seu inseparable Queno, complemento indispensable para manter a fervenza do seu humor, e quedou triste, moi triste, máis do que puido soportar.
.
Ana e Carmita quedan xa na memoria do corazón e nas letras dunha lápida. Cando ti, meu Antón, vés cada min ao cemiterio, con ocasión dalgún enterramento, nunca deixamos de facer un pequeno percorrido por diante dos nichos onde imos lendo os nomes que gardan en cada unha das súas letras todo canto foi relación humana: unha Vilalba está alí durmida para lembranza perpetua da nosa biografía. Durmida, digo, porque iso é o que significa a palabra cemiterio, dormitorio. E somos ben conscientes de que sen aquela relación mantida cos que alí repousan, moitos dos nosos pensamentos, valores e formas habían ser ben diferentes. Ti pregúntasme moitas veces o que penso eu de que, ao final, os nosos corpos sexan queimados no canto de enterrados. E eu sempre che digo que non me parece mal, pero, como amante dos simbolismos, non che nego o meu desexo de que as cinsas dos incinerados fosen gardadas nun lugar, un cemiterio, onde ti e mais eu puideramos ver unha plaquiña co seu nome. Para soerguer lembranzas, porque, se falla o esquecemento, é cando se morre totalmente. Menos mal que Deus é fiel, pero a nosa memoria precisa estímulos.
.
Por certo, falando disto, a nosa amiga Tita, a do Tomás, comentábanos estoutro día o que lle acontece actualmente cando visita o camposanto de Vilalba para deixar unhas flores e unhas palabras aos seus. Se se atopa soia, non deixa de sentir, polo visto, un desasosego de inquedanza, non por medo aos que alí dormen senón aos que poden andar moi espertos. Díxonos que desde hai xa un tempo, Vilalba non conta con aquel funcionario amable e servizal que exercía de enterrador, e engadía que este home, aparte do seu oficio, triste pero necesario, facía tamén outro labor non menos importante como era o de acompañar coa súa presenza a cantos alí se achegaban: non era preciso que falara, era suficiente que estivera. Ti e mais eu, Antón, tamén sabiamos daquel apreciable servizo e, por iso, aproveitamos este comentario da nosa amiga para rendérmoslle a Remigio, o finado enterrador, a homenaxe da nosa lembranza e pedirlle ao Concello, no nome de Tita, e seguramente de moitos veciños, que non demore a provisión dese posto imprescindible que acompaña os momentos máis dramáticos da nosa vida.
E remato. Hoxe foi de necrolóxicas, pero tamén a morte forma parte da vida. Cóidate, que non temos présa de irmos durmir. Unha aperta do teu amigo
.
Bernardo

jueves, 4 de junio de 2009

Cartas a Antón de Bernardo García Cendán 30-05-09


Aproveitando o contido desta carta e ó igual que o fixen acudindo o sábado as 20:30 á recepción que no Concello de Vilalba se lle deu ó Racing Club Vilalbés, quero darlle a miña felicitación os membros do Club: Xogadores, Entrenadores, membros da directiva e aficionados polo ascenso e o 1º posto no campeonato logrado polo equipo do noso concello, NORABOA!!!
.
Meu amigo Antón:


Unha vez máis, ti veña a preguntar e eu sen saber que che responder, pero recoñezo que me fas cavilar. Efectivamente, hai un par de domingos saímos do estadio da Madalena e escoitabamos sorprendidos na radio galega a reiterada comunicación de que a vila de Vilalba ardía de festa porque o Racing acababa de ascender á Terceira División, de categoría estatal. E non era verdade: Sí o era que as trescentas persoas presentes no campo tiñamos sorrisos nos beizos e aplaudimos canto puidemos, pero para un partido tan importante eramos realmente poucos, moi lonxe do número de socios con que conta a entidade. Tamén se escoitaron algúns foguetes que, como constatamos ti e máis eu, moitos dos paseantes pola Carretera atribuíron ás festas dalgunha parroquia. E nada máis, nin mesmo a bucina dalgún coche celebraba o acontecemento. Estes eran os feitos.

Antes de que se me esqueza, e seguindo as túas indicacións, quero deixar ben clariño que escribo estas observacións con tristura e sen a máis mínima pretensión de molestar ou, menos aínda, de culpar a ninguén por esa situación: non é máis ca un laio de dous vilalbeses desconcertados, a preguntárense que acontece neste pobo para que a vitoria dos nosos rapaciños, case todos, por unha vez, vilalbeses de nacenza e formados no seo do club, pasase tan desapercibida. Ninguén nos negará, dicías ti, que hai algún problema a resolver. Así que ti pregúntasme, eu tamén che pregunto, pero nin ti nin eu sabemos a solución.
.
E aínda a sabemos menos despois do acontecido neste mércores pasado. Ambos chegabamos xuntos de Lugo, á noitiña, sen nos ter apercibido de que na tele estaban retransmitindo o partido do Barcelona e a súa vitoria. Non ben baixamos do coche, observamos estupefactos que, agora si, Vilalba era unha festa: berros inauditos desde o bar da Pravia, ríos de champan no sempre sereno bar Caracas, con disfrace culé incorporado nos seareiros, cuadrillas de mociños, e de moitas rapaciñas, feito notable, a percorrer a Carretera con brúos e ouveos de posesos, coches detidos no centro da vila con xente empoleirada nos capós, botellas nas mans, e voces e berros mesturados co estoupido dos foguetes. Todo iso no contexto dun día de labor e véspera doutro. E seguimos coas preguntas: por que tanta esmorga neste caso, por unha Barcelona que nos cae tan lonxe, e tan pouco rebumbio no anterior por unha Vilalba que levamos nos miolos?
.
Será que aos noso veciños xa non lles interesa que Vilalba teña un club con oitenta anos de historia?: Imaxino que non é iso, por máis que o pareza: segundo lin na prensa, apenas hai concorrencia ás asembleas nin aparece xente que queira relevar aos actuais directivos, xa cansos, seica. Ti insistes na túa suposición de que a nosa vila quere manter vivo o seu club e que os seus socios non se desprenden do carné porque é un xeito de se sentiren pertencentes á nosa comunidade, aínda que non acudan ao estadio. Falando en simil relixioso, digo eu, son algo así coma crentes non practicantes: queren que haxa “igrexa” pero non a frecuentan. E ti continúas o razoamento supoñendo que mentres haxa alguén que se queira facer cargo da entidade, déixaselles facer e que todo siga igual sen que os socios se impliquen. A vida dos pobos pequenos éche así, conclúes, e non lle deas máis voltas. Pero, pregunto eu, por que han querer seguir os que agora gobernan?. Eles saberán, foi a túa resposta.
.
Quizais, ando eu a matinar, habería que seguir coa metáfora do relixioso: din que o fútbol é unha relixión na sociedade actual, e os “ídolos” son os que están no cumio, aos que só podemos ver de lonxe, pero non tocar, coma se fosen “deuses” pequeniños, algo sagrado. Están distantes de nós porque o paraíso sempre se ve no horizonte, pero, desde as alturas televisivas, alégrannos a vida e, por iso, non nos importa que, para conservalos, se acumule en España unha inmensa débeda económica que, ao final, habemos ter que pagar entre todos. Xa non sería a primeira vez. Pero non importa, porque sempre terá que existir un ceo que nos dea unha ledicia de cando en vez para seguirmos vivindo. O Racing Vilalbés aínda non é cousa sagrada nin é un ceo nin paraíso que acougue a destemperanza do domingo. Só é un un simulacro, simpático, pero non máis: non merece máis festa que a precisa. O importante é o que fan os grandes. Ti, Antón, evidentemente non cadras comigo nestas elucubracións nin renuncias a gastar euros en acudir algún día a un estadio de Primeira, ou pagar o Canal+, pero, se me das tempo, xa cho irei explicando.
Polo momento, se che comprace, axúdalle aos teus netos para que cheguen a ese ceo pequerrecho dos futboleiros, pero ti queda con Deus, co de verdade. Unha aperta
.
Bernardo .